viernes, 26 de abril de 2013

Actividades Profesionales: Sobre EPA, Indicadores de Servicios y Sociedades

Los datos de impacto social y económico que salían en este mes de abril aventuraban unas temidas cifras en la Encuesta de Población Activa (EPA) que ayer se confirmaron en nefastas. La ratificación de que las cosas no sólo no mejoraron en el primer trimestre del año, sino que ahondaron su caída, es clara fuera de los archiconocidos maquillajes políticos. La tasa de paro aumentó un 1,14% respecto al trimestre anterior hasta el 27,16%. Detrás de esta cifra son ya 6.202.700 parados, muchos de ellos, profesionales colegiados. La desagregación no invita al optimismo del número menguante de ocupados, que se sitúa en 16.634.700 personas; hay que decir que donde más se destruyó empleo fue en el ámbito público, con un retroceso del 2,45% respecto al trimestre anterior bajando hasta los 2.845.800 trabajadores. Mientras, los asalariados se redujeron cerca de un 1,5% hasta los 10.776.800 y los trabajadores por cuenta propia que suman 3.012.100 retrocedieron un 0,33%.

Ante este panorama, ¿es posible extraer algún dato positivo para el sector de servicios profesionales? Veamos… 

Si nos fijamos en los Indicadores de Actividad del Sector Servicios (IASS) que salieron hace pocos días, publicados en el INE, es posible sacar algunos datos significativos. Bien es cierto que, en un primer vistazo, el periodo de referencia estudiado, en términos interanuales, de febrero de 2012 a febrero de 2013 sigue marcando un cuadro económico difícil para las profesiones. La cifra, o volumen de negocio descendió un 9,2% y en el apartado de empleo, este, se redujo en un 2,5%. No obstante, la perspectiva y la profundización en el análisis de los datos, permite intuir tendencias alentadoras. ¿Cuáles? 
  • Si revisamos los anteriores indicadores de esta estadística, en el periodo de enero de 2012 a enero de 2013, eran peores, el volumen de negocio de las actividades profesionales descendía un 10,5% y el empleo un 2,9%. 
  • Y si nos referimos al periodo mensual de este año de enero a febrero y eliminamos el efecto calendario (diferentes días hábiles en ambos meses) y el efecto estacional (eliminación de fluctuaciones que distorsionan el análisis económico), el volumen o cifra de negocio de las actividades profesionales, es el subsector de servicios que más creció con un 1,5%
Por otro lado, la Estadística sobre Sociedades Mercantiles (SM) también publicada por el INE recientemente, refrenda esta incipiente —veremos si se confirma — tendencia. Así en el mes de febrero de las 8.644 sociedades mercantiles que fueron creadas, 1.115 tenían que ver con actividades profesionales. Por el contrario, también fueron destruidas 2.568 siendo 249 vinculadas al ámbito profesional titulado. De esta forma, hablamos de una balance positivo de 866 sociedades mercantiles gestionadas por profesionales.

La tendencia económica, seguirá siendo adversa en los próximos trimestres, y aún no se vislumbra con claridad el tramo final de la recesión. Por ahora, únicamente sólo se pueden dibujar ciertas perspectivas no demasiado sólidas y una confirmación: la formación cualificada y continuada se erige como uno de los valores añadido más importantes en la empleabilidad de los profesionales y en la aportación de los colegios profesionales a la sociedad.

miércoles, 17 de abril de 2013

¿Cómo construir un modelo de datos colegial común?

La cultura Open Data es ya una realidad fehaciente y transparente en España y el exterior —3º país en el mundo—. Fehaciente, porque son numerosas las instituciones que cada vez entienden que es absolutamente necesario gobernar desde la apertura con la transmisión de información clara a los ciudadanos; veáse País Vasco, Asturias, Cataluña, Castilla La Mancha, etc. Y transparente, porque suministrar datos de forma reutilizable supone un valor añadido tanto para las instituciones que publican como para la sociedad; la cual, atribuye una mayor credibilidad y confianza hacia los organismos públicos. ¿Qué tiene que ver esto con las organizaciones colegiales? En realidad, mucho: la sociedad demanda mayor información, datos de calidad, contrastables y útiles. ¿Qué más pueden hacer los colegios profesionales ante esta situación?. Una de las alternativas claras es construir un modelo de datos común alrededor de las profesiones y las entidades colegiales con el objetivo de homogeneizar la idea de sector profesional, suministrar información servicial a ciudadanos y colegiados y ser interlocutores más sólidos frente a las administraciones públicas. ¿Cuál es la propuesta? 

 Atlas Colegial sobre el sector de las profesiones

La creación de la figura de un Atlas Colegial como base del modelo de datos común de las profesiones sería el pilar básico de esta propuesta. Un modelo de recopilación y categorización de datos cuya voluntad sería mostrar todos los aspectos que existen alrededor del sector de las profesiones. Así, tendríamos un marco de consulta con cinco bloques de datos principales: 
  1. Datos colegiales institucionales 
  2. Macroeconómicos 
  3. Laborales 
  4. Sobre colegiados 
  5. Sobre sociedades profesionales 
Como ejemplo, organizaciones profesionales de EEUU o Europa utilizan bloques similares como referencia de su sector. 

Pasos esenciales para la construcción del modelo de datos 

Tal y como afirmó José Luis Ruiz, consultor tecnológico, en el seminario sobre datos que realizó Unión Profesional, «la construcción de este modelo sólo será factible si existe una clara voluntad, compromiso y capacidad de evolucionar los modelos planteados». De esta forma, las premisas principales en esta primera etapa serían: 
  • Proyectar un primer análisis de modelo semántico de categorías de datos a tratar homogéneo y transversal al conjunto de las profesiones que conlleve una metodología de trabajo automatizada.
  • Establecer herramientas tecnológicas comunes que puedan canalizar la recopilación y estructuración de datos según las diferentes categorías acordadas.
Las organizaciones colegiales tienen aún un potencial no desarrollado que unificado, daría lugar a una percepción del sector profesional más cercano a la sociedad y de servicio al cliente o paciente, fin último de cada profesional y, por ende, de cada entidad colegial. La función estadística se vislumbra, por tanto, como un paso capital en el camino constante de evolución de los organismos colegiales.

miércoles, 10 de abril de 2013

¿Qué puede aportar la publicación de datos a las organizaciones colegiales?

Cuando hacemos balance de una investigación sobre una materia que desconocíamos y aprendemos de ella, es interesante recordar la frase que enunció Isaac Newton: «Si he llegado a ver más que los otros es porque me subí a hombros de gigante». Una reflexión, que en el plano que buscamos construir, un modelo de datos colegial común, nos lleva a Tim O’Reilly, impulsor del software libre y el código abierto, cuando afirmó: «Si realmente quieres que los datos ayuden a la gente, no pongas a la gente a buscar datos. Haz que los datos ‘encuentren’ a la gente que trabaje con ellos y puedan mostrarles cómo lo hacen; ofrecerte su ayuda a través de su experiencia». Y es que, los datos se encuentran alrededor de las profesiones. Tenemos la materia prima necesaria, por tanto, ¿qué valor añadido supondría la publicación de datos para las instituciones colegiales?. Un aparato estadístico con datos acerca de las profesiones y los colegios situaría al sector de las profesiones con una ventaja consistente y clara capaz de sostener con argumentos precisos su potencial social y económico frente a propuestas de liberalización excesiva desde la Administración Pública. Porque, un sector que no posee datos agregados siempre será más vulnerable a los vaivenes de la política. Por ello, la oportunidad para las entidades colegiales es excelente y apremiante.

¿Qué es necesario para comenzar la construcción del modelo de gestión de datos? 

La clave fundamental para poner en marcha la elaboración de un modelo de gestión de datos sobre las profesiones y sus organizaciones colegiales donde se sumen el mayor número de miembros se encuentra en la necesidad de obtener los primeros resultados significativos sobre el sector de las profesiones que podrían incorporarse inmediatamente como refuerzo esencial en los argumentarios propios de cada institución colegial y que presentarían el sector de las profesiones más unificado al exponer su gran peso en la sociedad. Hablaríamos, además, de publicaciones orientadas por la cultura Open Data basada en la transparencia y reutilización de los datos de forma pública para generar un mayor valor añadido social

¿Qué ocurre cuando las estadísticas no existen o no son transparentes? 

Uno de los ejemplos más claros y actuales respecto al perjuicio que puede causar a las instituciones la falta de transparencia en los datos estadísticos lo pudimos apreciar ayer. La Fundación de estudios de economía aplicada (Fedea) denunció un ‘apagón informativo en relación a los datos de paro que publica el gobierno. Y es que desde que se hizo efectiva la reforma laboral en febrero, se hace más difícil entender la evolución del mercado de trabajo en detalle. Un hecho que juega en contra de la credibilidad institucional y choca con los principios enunciados por la Comisión Estadística de Naciones Unidas, cuando instauró el Día Mundial de la Estadística en 2010. Principios que conciben las estadísticas oficiales sujetas a unos estándares de calidad, objetivas, exhaustivas y consideradas como un bien público

Es necesario entender, por tanto, que el objetivo de construir entre todas las profesiones un modelo común de gestión de datos estadísticos dentro del universo colegial y profesional siempre irá en beneficio y fomento del bien común tanto para las organizaciones colegiales como para la sociedad.

viernes, 5 de abril de 2013

Función Estadística: Oportunidad para las organizaciones colegiales

La situación actual socioeconómica está provocando que ya no solo seamos exigentes al demandar transparencia sino también que la información publicada sea veraz y reutilizable. En este sentido, son cada vez más las entidades públicas y privadas que proponen iniciativas en el creciente marco Open Data (cultura de gobierno abierto) que muestran la transparencia de sus actividades y que realizan estudios estadísticos tanto desde un punto de vista interno, como de su entorno. Las organizaciones colegiales homólogas a Unión Profesional, como en Alemania, Francia, o en algunos casos de profesiones a nivel europeo, exponen un gran interés por presentar de manera transversal en términos estadísticos como se encuentra el sector profesional. ¿Por qué no existe un proyecto de datos comunes de las profesiones colegiadas en España? 

Esta fue precisamente una las preguntas que vertebraron el seminario que Unión Profesional celebró el 12 de marzo, titulado La función de gestión de los datos estadísticos de los colectivos profesionales en la consolidación de las organizaciones colegiales. Un nuevo modelo de referencia

¿Por qué es necesario un modelo datos estadísticos para las organizaciones colegiales? 

Como sabemos, las organizaciones colegiales tienen tres funciones esenciales a día de hoy: deontológica, formativa y aseguradora. El hecho de establecer una función estadística actualizada, completa y comparable acerca de los datos que atañen a cada una de las profesiones sería beneficioso por dos motivos principales: 
1) Se favorecería la transparencia institucional de cara a la sociedad y las administraciones públicas.
2) La agregación de información estadística de todas las profesiones mostraría una imagen de conjunto que permitiría nutrir con datos tanto los argumentos comunes del sector, como particularmente de cada profesión
¿Cuáles serían las potencialidades de un modelo datos de las profesiones? 

Dentro de las posibles aplicaciones que posibilitaría un modelo de gestión de datos de las profesiones articulado mediante la función estadística de cada organización colegial se encontrarían: 
1) Calibrar el impacto de la Ley de Servicios Profesionales (LSP): Una arquitectura de datos del sector profesional podría sustentar un análisis econométrico sobre el impacto económico y sobre todo social que podría causar la aprobación de la ley.
2) Avanzar hacia un sistema estandarizado europeo de datos: La composición de datos comparables de forma armonizada en la esfera europea e internacional reforzaría el papel de las profesiones y de Unión Profesional. Una situación que favorecería el análisis y presentación de nuestro subsector por organismos internacionales como la OCDE. 
En cualquier caso, publicar no es suficiente; es necesario establecer una estrategia de comunicación clara y enmarcada en la que la elaboración y publicación de datos tenga un valor social por sí mismo que reportaría en una mayor confianza, en este caso, sobre las organizaciones colegiales. Elinor Ostrom, nobel de economía en el año 2009, apuntó el concepto “common pool of information” abogando por la idea de que la información no debe mostrarse solo por criterios economicistas sino por un compromiso de transparencia basado en el acceso libre y de entender la información y los datos como un bien común. Un ejemplo que sería extrapolable a la gran labor que realizan los colegios profesionales. El coste de oportunidad para las organizaciones colegiales de no asumir esta filosofía podría lastrar su gran potencial; qué mejor reto para este año convulso que intentarlo.